Errores conceptuales

¿Hasta cuándo seguimos parchando la economía? 
 
El País, y así lo declaró el propio Ministro Yépez, ya no necesita más impuestos sino entrar en la recta de la reactivación.  Pero, tuvo que golpearse él mismo porque a las pocas horas, unos cuantos jubilados, aparentemente viejos y cansados, lo pusieron en jaque y le cambiaron el rostro, de una sonrisa abierta a una seriedad fastidiosa.  Lo primero que salió a decir que el problema era de centenas de millones y que se vendría la debacle económica.  Luego, en domingo, en forma terminante dijo que el Presidente Lucio había decidido incrementar el Iva para "regalar" con nuestra plata, lo que otros le habían mezquinado al IESS.  La decisión era tal, que sonaba a prepotencia.  Pero, horas antes o después de esa terminante decisión, el Presidente hablaba de buscar otras alternativas y se hizo una especie de concurso.  Si alguien encuentra otra solución, la acojo y cambio.  Esto era obvio, Yépez, no tenía otra alternativa y probablemente, ni la había buscado ni se le ocurriría.  Como nadie se pudo ganar el premio, a pesar de las voces que se levantaron para dar ideas, entonces vino la constante decisión de formar una comisión que, ahora, solo dará ideas y no pre - resolverá el problema, porque sus miembros no son la decisión del Congreso, por ejemplo.
 
Ahora resulta que lo mejor es pagarle a los jubilados con los vicios.  Impuestos a los licores y cigarrillos.  Échale agua al caldo, dice el dicho.  No se ve que por ahí se financien las centenas de millones de dólares, salvo que el problema no era ni es lo que decían, ¿a lo mejor para asustarnos, como estilan hacerlo?  Pero el transfondo ya lo mostraron, como lo dijimos en opiniòn anterior, hay que salvaguardar y defendernos de las petroleras para no devolverles el Iva, reinterpretando la norma vigente.  ¡Cuidado!  Y, ¿no dizque queremos aperturar la inversión en el sector y a medio camino, porque se cree que están perjudicando con la disposición legal que el mismo país impuso, cambiamos las reglas del juego? 
 
Por otro lado, queremos acabar con las preasignaciones y seguimos dándole al concepto.
 
Este no es el país de Ripley.  Este es el país de la contradicción.  Las cosas van conforme avanza el día y no ajustamos el trabajo del día a buscar ese norte u objetivo que todos quisiéramos en el Ecuador, para evitar tener que emigrar, a pesar de que la Ministra de Turismo dice que todo está bien.